El VII Congreso europeo sobre Cerveza y Salud, celebrado en Bruselas, reunió, este miércoles, a unos 160 expertos internacionales en medicina, nutrición y dietética provenientes de 24 países. Investigadores españoles del Hospital Clínic de Barcelona, de la Universidad de Barcelona y del Centro de Investigación Cardiovascular (CSIC-ICCC), resaltaron los beneficios de la cerveza, con y sin alcohol, en la salud cardiovascular, obesidad, nutrición y prevención del envejecimiento celular.
En esta bebida se han encontrado hasta 50 tipos de polifenoles, compuestos que se encuentran mayoritariamente en alimentos de origen vegetal. Estos compuestos son unos de los antioxidantes naturales más eficaces que se encuentran en la naturaleza, con mayor capacidad que, por ejemplo, la vitamina C. Por su alto poder antioxidante, los polifenoles bloquean el proceso de carcinogénesis, frenan el envejecimiento celular que produce enfermedades degenerativas como el Parkinson o el Alzheimer, retrasan el envejecimiento de la piel, reducen los riesgos de padecer ECV (enfermedades cardiovasculares) y mejoran la resistencia a la insulina.
La rehidratación que proporciona la cerveza a los deportistas, tras realizar ejercicio, fue otro de los aspectos destacados durante la jornada.
Al contrario que otras bebidas alcohólicas, aporta poca cantidad de alcohol, mucha cantidad agua (95%) y potasio, lo que la hace apta para la rehidratación de los deportistas. Además debido a su alto contenido en polifenólicos la cerveza reduce la inflamación e infección de las vías respiratorios, por lo que se planteó como un complemento alimenticio favorable para deportistas, ya que el ejercicio prolongado aumenta el riesgo de enfermedades en las vías respiratorias superiores.
La doctora de salud publica en el Reino Unido Kathryn O’Sullivan desmintió la creencia de que la cerveza causa «barriga cervecera» al «no tener ninguna base científica».
Explicó que el consumo excesivo de cualquier tipo de alcohol puede llevar al aumento de peso, pero no si se hace de forma moderada.
En cuanto a las cantidades que se consideran moderadas, en hombres, son dos cañas al día y una en mujeres.
