Los cuerpos celestes no pueden ser objeto de apropiación, no obstante en 1976 varios países hicieron declaraciones de soberanía sobre una parte del espacio
En 1967 nació el Tratado del Espacio en el seno de las Naciones Unidas. Este Tratado se abrió a firma de todos los miembros de la comunidad internacional. Es decir, cualquier estado podía firmar voluntariamente y obligarse a respetarle, ademas de también poder obligar a que lo respeten quienes lo firmaron. Pero con el paso del tiempo esta norma( el Tratado) se ha convertido en una norma de derecho de costumbre. (Es decir, TODOS los Estados deben acatarla).
En su articulo II dispone que » El espacio ultraterrestre,incluso la Luna y otros cuerpos celestes, no podrán ser objeto de apropiación nacional por reivindicación de soberanía, uso u ocupación, ni de ninguna otra manera».
Sin embargo,desde entonces varios países hicieron declaraciones de soberanía sobre una parte del espacio.
Así es el caso de Colombia, quien a pesar de haber firmado y ratificado el tratado desde un principio, declara tener soberanía sobre un segmento de la órbita geoestacionaria (zona donde se encuentran los satélites) por el hecho de estar situada paralelamente al propio Estado de Colombia. Por lo que pretendía cobrar a todos los Estados que tuvieran satélites y pasasen por esa zona.
Colombia afirmó que ella era libre de decidir hasta donde terminaba su territorio verticalmente y hasta donde establecer su soberanía, violando así el Tratado del Espacio que ella misma firmó.
En su defensa Colombia alegaba que en el Tratado no se definía el término «espacio», por lo que cada Estado podía tener su propia interpretación del término. Y así, Colombia interpretaba que la órbita geoestacionaria no lo era.
Al año de esta reivindicacion por parte del nombrado estado se sumaron al carro Brasil, Congo, Indonesia, Kenia Uganda y Zaire. Estos Estados también reclamaron soberanía en sus fragmentos verticales de la órbita geoestacionaria.
Durante doce años estos países mantuvieron discusiones acaloradas con el resto de países contrarios en el seno de la ONU. Con el paso de los años cesaron sus reivindicaciones y Colombia volvió a quedarse solo en sus pretensiones.
Finalmente también tiró la toalla puesto que Colombia NO cuenta con satélites propios en su órbita, y como necesita conexión satelital para sus servicios domésticos y para interconectarse con el resto del mundo, no le ha quedado mas remedio que solicitar los servicios de satélites de otros países.