Es bien sabido que durante el invierno son más frecuentes los estados de depresión y melancolía. En los países nórdicos llega hasta aumentar la tasa de suicidios ya que sus inviernos suelen ser más de la mitad del dia oscuridad completa.
Un estudio sobre ratones ha demostrado que os ratones expuestos a cantidades de luz menores y más irregulares sufren depresión y experimentan problemas de aprendizaje.
En este pequeño experimento dividieron a unos ratones en dos grupos, uno sometido a un ciclo normal de 12 horas de luz y 12 de oscuridad, y el segundo a un ciclo anormal que consistía en 3,5 horas de luz y 3,5 horas de oscuridad.
Los ratones con ciclos anormales presentaban mayor nivel de corticosterona la hormona que segrega como respuesta el cuerpo debido a la ansiedad y suele acabar provocando momentos depresivos en las personas.
