La evolución del hombre continúa
Los humanos han evolucionado mucho en comparación con los primeros Homo sapiens. Aunque parezca que la evolución del hombre se detuvo, no es así, sigue lenta y constante a través de los siglos.
Como evidencia de ello, un equipo de científicos descubrió una nueva arteria en los antebrazos de algunos bebés. El descubrimiento lo hicieron científicos de la Universidad de Flinders, Australia.
La arteria mediana es parte de la evolución del hombre
La nueva arteria, o “arteria mediana”, se forma durante las primeras semanas de gestación dentro del vientre materno. También recibe el nombre de arteria satélite del nervio mediano. Se encuentra en el centro del antebrazo y lleva sangre a las manos mientras estas se desarrollan. Sin embargo, desaparece alrededor de las ocho semanas de gestación del feto.
En ese momento ya no tiene utilidad, pues ya se formaron las otras dos arterias que acompañarán al bebé toda su vida. Estas arterias son la cubital y la radial. La radial es la que se utiliza para medir el pulso de una persona.
Lo que llamó la atención de los científicos es que la arteria mediana está presente en cada vez más gestaciones. La investigación continuó y descubrieron que muchas personas adultas tienen esa arteria.
La arteria mediana comenzó a figurar más en el siglo XIX
Gracias a otras investigaciones detectaron que ya en el siglo XIX la arteria mediana estaba presente en cada vez más personas. En esa época, la incidencia era del 10% de la población. A finales del siglo XX, este porcentaje aumentó a un 30%.
Esto indica una microevolución y prevén que la presencia de dicha arteria será cada vez más frecuente en los próximos 80 años. Es decir, cada vez más adultos conservarán la arteria mediana, además de la cubital y la radial en sus brazos.
Los estudios fueron posibles gracias a la donación de cadáveres en Europa y Australia. Los investigadores anatomistas afirman que esta característica se afianzó con el paso del tiempo. Determinaron que puede tratarse de una mutación de los genes que se encargan de desarrollar la arteria mediana. Otra posibilidad son problemas en la salud materna durante la gestación o ambas causas.
El estudio se publicó en la revista Journal of Anatomy. Se cree que para 2100 la arteria mediana será común en la mayoría de los nacimientos. Sin embargo, todavía para la ciencia no es determinante como un nuevo rasgo humano. Se lo considerará como tal cuando supere el 50% de las personas nacidas con dicha arteria.
¿Beneficia o perjudica tener la arteria mediana?
La presencia de una arteria adicional puede ofrecer mayor destreza en los dedos de las manos. También tener unos antebrazos más fuertes, aunque, como contrapartida, puede ofrecer mayores desventajas. Una de ellas puede ser el sufrir con mayor frecuencia del síndrome del túnel carpiano.
La evolución del hombre continúa, como lo demuestra el hecho de que cada vez hay menos personas con el tercer molar. Cada vez hay menos individuos que en su dentadura está presente la llamada “muela de juicio”.