La electricidad puede curar cicatrices
¿Cómo lo hace? Los científicos de la Universidad de Friburgo (Alemania) tienen la respuesta. Desarrollaron un biochip específicamente diseñado para este fin. Utiliza la electricidad para curar heridas hasta tres veces más rápido de lo normal. Sí: la electricidad puede curar cicatrices velozmente.
Los campos eléctricos pueden guiar los movimientos de las células de la piel. Las empujan hacia el lugar de una lesión. De hecho, el cuerpo humano genera un campo eléctrico que hace esto de forma natural. Los investigadores ampliaron este efecto. Así, reduce radicalmente el tiempo de recuperación de pequeños desgarros y laceraciones.
Pacientes con esperanza
Serviría para las personas con heridas crónicas que tardan mucho en curarse, como los ancianos. También los diabéticos o las personas con mala circulación sanguínea. Recuperarse rápidamente de pequeños cortes abiertos frecuentes podría ser literalmente un salvavidas. Lo destacó la científica especializada en bioelectrónica de la Universidad de Friburgo, Maria Asplund.
Los científicos desarrollaron una plataforma bioelectrónica. La utilizaron para cultivar piel artificial formada por células llamadas queratinocitos. Son el tipo celular cutáneo más común y resultan cruciales para el proceso de cicatrización. También compararon la aplicación de campos eléctricos en un lado de la herida con campos alternos al otro.
Migración veloz
Y coincidió tanto los queratinocitos sanos como los diseñados para parecerse a los de las personas con diabetes. Migraron hasta tres veces más rápido que las células de la piel sin ninguna interferencia eléctrica. Un empuje eléctrico desde un solo lado de la herida resultó ser el más eficaz. Reparaba la piel artificial en el menor tiempo. Afortunadamente, ninguna de las células resultó dañada por los campos eléctricos probados.
La electricidad puede curar cicatrices velozmente. Las heridas que no se cicatrizan con la rapidez típica aumentan el riesgo de infección y retrasan aún más la curación. En los casos más graves, esto puede llevar a la amputación. Por eso este proceso merece ser investigado por pacientes y profesionales sanitarios.