Diego Martínez Santos, de 30 años de edad, fue premiado por la Sociedad Europea de Física con el galardón al mejor físico joven del continente por el trabajo que realizó durante tres años en el Laboratorio Europeo de Física de Partículas. Actualmente, este científico gallego está contratado por el Instituto Nacional de Física de Holanda, aunque también desarrolla un trabajo de investigación en el acelerador de partículas de Ginebra.
Sin embargo, este currículum no acabó de convencer a la comisión que otorga las becas Ramón y Cajal, creadas para propiciar el regreso a España de talentos científicos. La solicitud presentada por Diego fue denegada al considerar que le faltaba «liderazgo internacional».
