Existe un niño que no puede parar de reír
Eland Elliot, tiene dos años y nació con síndrome de Angelman, un trastorno cromosómico que causa graves dificultades de aprendizaje y una sonrisa permanente en su cara. Lo que causa que la gente que sufre este síndrome no puede dejar de sonreír o reír.
La madre de Elliot declaro que: “Cuando nos sentimos desanimados, la risa de Elliot nos mantiene a todos en marcha, sólo que hay mirarlo y nos contagia su alegría”, “Al final del día, sólo quieres que tus hijos sean felices, y Eliliot lo está siempre“ Añadió.
Cuando todavía era un bebé tenia problemas para alimentarse, por lo tanto fue enviado a un mejor hospital y le detectaron esta extraña enfermedad.
Esta enfermedad hace que Elliot nunca podrá hablar, y duerme poco, lo que para un niño de su edad es bastante peligroso.