El Super Glue fue inventado por accidente
El cianoacrilato (nombre del adhesivo), un pegamento muy popular y duradero, fue desarrollado por accidente en 1942 por Harry Coover. Trabajando como químico en Eastman Kodak, le encargaron a su equipo un material plástico transparente que fuese adecuado para las miras de los fusiles. El compuesto que obtuvieron era un material extremadamente pegajoso, que se adhería a todo por lo el proyecto fue rechazado.
Años después, Coover se encontró de nuevo con este material y junto a Fred Joyner descubrieron el potencial comercial del adhesivo, que salió al mercado con el nombre «Eastman 910» en 1958. El pegamento que inventaron no necesitaba ni presión ni calor, hacía uso de la fina capa de humedad de los objetos para lograr la unión.
En los 60, Kodak le vendía cianoacrilato a Loctite, que lo distribuía bajo otro nombre comercial. En 1971, Loctite empezó a producir su propio cianoacrilato, «Super unión».