Hasta que no me lo dijeron y lo busque, no me lo creí. Pero es cierto, el símbolo matemático √ comenzó a utilizarse sobre el año 1525, introducido por Christopher Rudolf como una letra r, pura y dura, como abreviatura de la palabra «radix», la palabra «raíz» o «radical» en latín. Aun así, la operación matemática del radical es tan antigua que incluso era conocida por los egipcios en el 1600 a.C.
Otra teoría, menos apoyada, dice que el signo actual evolucionó a partir de un punto (signo que en ocasiones se utilizó delante de las expresiones para indicar la extracción de la raíz cuadrada) al que más tarde se le añadió un trazo oblicuo en la dirección del radicando.
