El hombre puede producir leche paterna
Es bien conocido el hecho de que una madre adoptiva de un bebé puede dar de mamar si previamente ha recibido durante meses una estimulación contínua de sus pechos (ya sea por un sacaleches o por otro bebé). Algunos autores defienden que si este hecho es posible en las mujeres, puede serlo también en los hombres y, de hecho, se han documentado casos de que esto ha sido así. Además, se sabe que la estimulación de los pechos y los pezones lleva a un incremento de prolactina en ambos sexos. La prolactina es la hormona que estimula la producción de leche en las glándulas mamarias, en las mujeres embarazadas la concentración de esta hormona aumenta significativamente. Está presente tanto en hombres como en mujeres, aunque generalmente la concentración de esta hormona es insuficiente para inducir la producción de leche.
Claro que nadie dijo que sería fácil. Para que la estimulación logre algo debe hacerse todos los días, durante meses y durante largos periodos de tiempo. Esto se lo pone muy difícil a aquellos padres entusiastas que tienen la ilusión de dar ambos de mamar a su bebé.
Muchos médicos han negado rotundamente que la leche producida por un hombre posea la composición adecuada y la suficiente calidad para un bebé humano. Pero lo cierto es que, tras el análisis de leches de varios hombres producida por causas «naturales», se observó que su composición era prácticamente idéntica a la leche materna. La única diferencia era que no se encontraban algunas enzimas con un papel poco importante. En otras especies animales, en las que también se dan machos que producen leche, se ha comprobado que la composición de la misma es equivalente a la de la hembra.
Aún así, es innegable que la cantidad de leche que puede producir un hombre es muy poca comparada con la mujer y además, no todos los hombres pueden ser capaces de producir leche por causas «naturales».