Detectan 15 señales de radio que provienen de una galaxia a 2.400 millones de años luz
Breakthrough Listen, un proyecto colaborativo internacional para buscar rastros de civilizaciones extraterrestres, ha podido detectar una explosión de radio rápida (FRB) 121102.
Los FRB son pulsos breves y extremadamente enérgicos de ondas de radio cuyo misterioso origen ha desconcertado a los científicos durante los últimos dos años. Pero el FRBR 121102 es aún más especial, ya que es el único que se ha repetido. Esta característica ha permitido estudios detallados de la fuente, ya que se han podido detectar hasta 15 pulsos de alta frecuencia durante solo dos exploraciones de 30 minutos en esa zona del espacio.
«Nunca se han visto estallidos de radio con frecuencias tan altas», afirma Andrew Siemion, director del Berkeley SETI Research Center y del programa Breakthrough Listen.
El proyecto ha utilizado el Green Bank Telescope, que es capaz de grabar varios gigahercios de ancho de banda a la vez. Esto permitió al equipo detectar la emisión de frecuencias más altas. Durante las cinco horas de observación, se recolectaron 400 terabytes de datos, y ahora lo están investigando.
«Además de confirmar que la fuente ha sido realmente activa, la alta resolución de los datos obtenidos por el Listen permitirá medir las propiedades de estos misteriosos estallidos con una precisión muy alta», afirma el investigador Vishal Gajjar, quien descubrió las señales.
La explicación más probable del FRB son los eventos transitorios. Las colisiones de estrellas de neutrones, las hipernovas u otras explosiones pueden explicar la repentina, potente y extremadamente breve emisión de fuentes de radio. Sin embargo, una fuente repetitiva como FRB 121101 requiere una explicación diferente. Después de que su origen se localizara en una galaxia a 2.400 millones de años luz de distancia, los investigadores fueron capaces de desentrañar el misterio un poquito más.
La galaxia es pequeña -solo un quinto de tamaño de la Vía Láctea- pero está produciendo estrellas a un ritmo increíble. La señal proviene de un gran vivero estelar, por lo que los investigadores creen que el origen es una estrella de neutrones magnéticos extremadamente potente.
Pero las hipótesis no han dejado de aparecer. La idea más repetida es la que afirma que se trata de pulsos de láser alienígenas utilizados para propulsar naves espaciales, de un modo parecido al que quiere utilizar Breakthrough Starshot para enviar una pequeña sonda a Proxima Centauri. Habrá que seguir analizando los datos.