¿Cómo se forman las burbujas en el cava?
Botellas de champán o cava nos esperan estos días para hacer los típicos brindis navideños. Y como cada año, alguno tras dar el primer sorbo dirá que le hacen cosquillas las burbujas, pero, ¿sabemos por qué se forman?
El contenido no es más que vino, zumo de uva fermentado, pero ¿por qué algunos vinos son espumosos y otros no? Tal y como explica Antonio Ruiz de Elvira, profesor y catedrático de Física de la Universidad de Alcalá (Madrid), cuando se deja madurar el zumo de uva (o mosto) encerrado en cubas sin intercambio de oxígeno, se produce un proceso por el cual cambia su azúcar a alcohol. En esa reacción química se desprende anhídrido carbónico (CO2), una especie de bolitas de gas, que se reparten por el líquido.
Una vez fermentado se deja salir el CO2 y se embotella el vino. En el caso del vino blanco, se embotella antes de que termine el proceso, por lo que el vino sigue fermentando en la botella, dando lugar a los vinos espumosos como el cava. En ocasiones, se induce esta segunda fermentación añadiendo al vino, ya hecho y embotellado, azúcar y levadura.
Este gas carbónico que se desprende en la fermentación hace que aumente mucho la presión en el interior de la botella por eso se produce una liberación de energía al descorcharla.
Hasta 1662 no se pudieron fabricar vidrios y tapones suficientemente resistentes como para aguantar este aumento de presión en la botella al formarse el CO2. Fue a partir de entonces cuando los fabricantes encontraron el secreto para crear un vidrio grueso y un tipo de tapón de corcho capaz de soportar la propia fermentación del vino en el interior de la botella.