Estamos cerca de erradicar, por segunda vez en la historia, una enfermedad
En 1980, la Organización Mundial de la Salud declaró oficialmente que una de las enfermedades más mortales de la historia de la humanidad, la viruela, había sido erradicada. Esto marcó un hito: era la primera vez que una enfermedad se había eliminado completamente de la faz de la Tierra. Y no fue fácil: se necesitó un enorme esfuerzo y colaboración, sobre todo de la participación de campañas de vacunación a nivel mundial, la prevención y la vigilancia.
Ahora, sorprendentemente, la humanidad está cerca de erradicar la segunda enfermedad del planeta, y quizá nunca hayas oído hablar de ella: la enfermedad del gusano de Guinea.
Si bien no es habitualmente letal, lo que podría hacer que no recibiera la atención que se merece, la enfermedad del gusano de Guinea (o dracunculiasis), es absolutamente terrible y puede debilitarte de forma permanente. El método de infección es a través del agua, cuando un ser humano ingiere este líquido conteniendo larvas de este animal. Estas, una vez dentro del organismo, se adhieren a la pared intestinal y crecen dentro del cuerpo durante aproximadamente un año, alcanzando una longitud de hasta 80 centímetros.
Transcurrido este tiempo, el gusano migra del lugar antes de emerger, normalmente, por los pies, a través de una ampolla muy dolorosa. El agonizante proceso puede durar hasta 30 días, durante los cuales la persona infectada a menuda trata de aliviar el dolor sumergiendo el área infectada en agua, que lo que hace en realidad es re-iniciar el ciclo infeccioso, si el líquido tiene larvas.
El expresidente estadounidense Jimmy Carter fue uno de los percusores de la erradicación de esta enfermedad, ya que fue testigo directo del sufrimiento que produce: «vi a una mujer joven con un bebé en sus brazos… pero no era un bebé era su pecho derecho. Medía más de un pie de largo. Y, del pezón, salían gusanos». La mujer tenía un total de 11 gusanos en su cuerpo, y fue esta escena lo que le llevó a establecer una nueva misión en su fundación sin ánimo de lucro Centro Carter: erradicar la enfermedad del gusano de Guinea.
En 1986, había más de 3,5 millones de casos del gusano de Guinea en todo el mundo, y la enfermedad era endémica en casi 24.000 pueblos de 21 países de África y Asia. Ahora, gracias a tres décadas de duro trabajo, sólo quedan 126 casos existentes, según ha anunciado el Centro Carter. Por otra parte, ahora sólo es endémica en 30 aldeas de cuatro países, los cuales todos pertenecen a África. Si esta tendencia continúa, la dracunculiasis pronto se convertirá en la primera enfermedad parasitaria que se erradique, y la primera en ser eliminada sin vacunas ni medicamentos.
La enfermedad del gusano de Guinea es un candidato ideal para ser erradicado, ya que sólo se transmite por una vía; si esta se interrumpe, la infección se puede detener. La estrategia fue, por tanto, muy simple: educar a los habitantes de las zonas afectadas y distribuir filtros baratos que la gente pueda utilizar para eliminar los parásitos del agua potable. Los dispositivos consistían en tubos de plástico baratos y provistos de un filtro de malla de acero que puede ser lavado y reutilizarse. También, se ofreció una recompensa de 100$ a las personas que reportaran nuevos casos de la enfermedad, una cantidad de dinero enorme en muchas aldeas africanas.