Momias de cachorro de león descubiertas en Egipto
Un hallazgo único y sorprendente
La cultura egipcia es célebre por diferentes motivos. Su maravillosa y monumental arquitectura, su iconografía y mitos de ensueño… y sus momias, entre muchas otras cosas. Con esto último tiene relación esta noticia. El Ministerio de Antigüedades de Egipto ha dado a conocer un hallazgo sorprendente, único hasta la fecha. Dos momias de cachorro de león, de unos ocho meses de edad, han sido localizadas. Las momias se han descubierto durante unas excavaciones dirigidas por el arqueólogo Mostafa Waziry. Fue en la zona arqueológica de Saqqara, en las inmediaciones del Bubasteion. Un templo dedicado a la diosa gata Bastet.
No solamente momias de cachorro de león
Las dos momias de cachorros de león se han datado en la dinastía XXVI (664-525 a.C.). Lo que hace aún más llamativo a este hallazgo es, tal como ha declarado con entusiasmo Mustafa Waziri, jefe del Consejo Supremo de Antigüedades, que «esta es la primera vez que encontramos una momia completa de un león pequeño». En 2001, en la misma zona, el arqueólogo Alain Zivie descubrió los restos del esqueleto de un león. Junto a estas momias también se han localizado una veintena de momias de gatos. Estaban en el interior de cajas de madera. Hallaron varias momias más que al parecer pertenecen a grandes felinos. Podrían ser leopardos o guepardos.
También se han desenterrado las momias de varias aves y otros animales. Cocodrilos y escarabajos, fragmentos de sarcófagos, máscaras funerarias, recipientes cerámicos. Se encontró 75 figuras de madera entre las que se encuentran representaciones de un toro Apis, una mangosta, un ibis, un halcón y el dios Anubis con cabeza de cánido. Se suman 73 figurillas de bronce que representan divinidades como Osiris, Ptah-Sokar y la fiera diosa leona Sekhmet. Tras su presentación, todos estos objetos serán estudiados y restaurados a la espera de su exposición en distintos museos del país.
Lindo gatito, lindo gatito…
Los leones tenían un estatus privilegiado en el antiguo Egipto. Eran símbolos de poder y protección. Los faraones participaban en cacerías de estos felinos para demostrar su valor y hombría. Por ejemplo, Amenhotep III declaraba orgulloso haber cazado más de 102 de estos grandes felinos. Y solo en su primer año de reinado. Los leones también vivían como mascotas en los complejos reales.
Faraones como Tutankhamón o Ramsés II aparecen representados en algunos relieves acompañados de estos felinos. Incluso el escritor griego Elio Arístides, que vivió en el siglo II, afirmó haber visto leones en algunos templos de Saqqara que eran alimentados con gacelas vivas. A pesar de su evidente importancia, en Egipto apenas se han hallado momias de leones, lo que hace de este descubrimiento un hito importante en la investigación egiptológica.
Vaya que en Egipto tenían una fijación con las momias. Estas momias de cachorro de león se suman a los millones de ibis que también sacrificaron con fines rituales, y docenas de otras especies animales. Lo tenían muy claro. ¿Respiraba? Pues a momificarlo.