Descubren más de 100 especies en las tripas humanas
Aunque no lo creas, tu cuerpo es perfecto para acoger otros seres vivos. Sabemos desde hace tiempo que uno de estos lugares preferidos es el intestino, sobre todo para las bacterias.
El doctor Samuel Forster, del Instituto Hudson de Australia, es el primer autor de un artículo en Nature Biotechnology que informa sobre la mayoría de las especies presentes en muestras fecales de residentes en Reino Unido y Canadá: identificó 273 especies de bacterias, de las cuales 105 eran completamente desconocidas anteriormente y otras 68 no habían sido secuenciadas anteriormente. Muchas especies vienen en diversas cepas, con 737 identificadas en este estudio.
El mismo experto ha afirmado en declaraciones a IFLScience que las estimaciones de la cantidad de especies bacterianas que viven en humanos en todo el mundo varían en hasta 5.000, pero cada uno de nosotros probablemente alberga solo 200. Algunas son compartidas por la mayoría de la humanidad, otras son específicas de pequeñas localidades o dietas inusuales.
El ecosistema de nuestros intestinos es muy poco conocido porque es difícil de cultivar. Samuel Forster explica que cultivar la diversidad de microbios que florecen dentro de alguien para que crezca en el exterior es como replicar la diversidad de una selva tropical desde cero. Diferentes bacterias intestinales se alimentan de diferentes nutrientes, a menudo no de los ingredientes crudos que ingerimos, sino de los productos de desecho de otros microbios.
Examinar el ADN de las bacterias en muestras fecales es como «encontrar una colección de piezas de un puzzle», según el mismo experto. Las bases de datos, dice, son «como la caja del puzzle, ya que nos permite saber a qué puzzle pertenece cada pieza».
En los últimos años, las bacterias de nuestros intestinos, antes ignoradas excepto en caso de infección grave, han llegado a ser cada vez más reconocidas como parte importante de nuestra salud. Desde su control sobre nuestra dieta hasta su influencia en la salud mental y posiblemente incluso en las enfermedades neurodegenerativas, estas células son muy importantes, por lo que es hora de empezar a entender qué tenemos en nuestros estómagos.