Descubren en Arabia Saudí unas huellas humanas de hace 85.000 años
Otra pieza más al rompecabezas que significa la historia evolutiva de la especie humana. Un grupo de investigadores han descubierto un conjunto de huellas humanas de 85.000 años de antigüedad en Arabia Saudí.
Esto se une al descubrimiento de hace un par de años de un hueso de dedo humano realizado en la misma región, que data más o menos de la misma época, lo que indica que nuestros antepasados estaban claramente pasando por Oriente Medio decenas de miles de años antes de lo que se pensaba,
Descubierto en la región noroccidental del país, este hallazgo fue anunciado la semana pasada por el presidente de la Comisión Saudita para el Turismo y el Patrimonio Nacional, el príncipe Sultan Bin Salman, con motivo de su visita al Museo Nacional de Tokio donde está inaugurando una exposición que destaca algunos de los artefactos más significativos de Arabia Saudí.
Los investigadores todavía están analizando las huellas, que según los informes muestran que varias personas se dispersaron en varias direcciones, y esperan publicar los resultados, incluida una estimación más aproximada de la fecha, en los próximos meses.
Aunque hoy en día Arabia Saudí tiene un clima desértico, hace 85.000 años era irreconocible: los pastizales florecían, habían leones, leopardos, hienas… También, se cree que por aquella zona coincidimos con los neandertales, ya que ellos estaban establecidos allí.
Si bien ahora se sabe que nuestros antepasados evolucionaron en África hace al menos 300.000 años, y probablemente en múltiples bolsas diseminadas por el continente, discernir cuándo colonizamos el resto del mundo es complicado. Originalmente se pensó que los humanos modernos emigraron hace más o menos 60.000 años, pero en los últimos años, esta teoría ha ido menguando.
Unos artefactos datados de hace 65.000 años descubiertos en Australia implican que abandonamos África en una fecha más temprana, mientras que una mandíbula humana descubierta en Israel y con una datación de 120.000 años atrás agrega aún más peso a esta teoría. Aún no se sabe si las primeras excursiones desde África tuvieron éxito o no, pero lo cierto es que estamos explorando mucho más allá de lo que antes podíamos imaginar.