Un consumo moderado y responsable de vino puede reducir la probabilidad de desarrollar diabetes
Beber con moderación, entre tres o cuatro veces por semana, parece ayudar a evitar el desarrollo de la diabetes. El estudio, publicado en la revista Diabetology, examinó los hábitos sobre el consumo de alcohol de 70.551 hombres y mujeres daneses.
«Nuestros hallazgos sugieren que la frecuencia de consumo de alcohol está asociado con el riesgo de padecer diabetes: consumir algo de alcohol durante 3 o 4 días a la semana se asocia con un riesgo menor», afirman los investigadores.
La investigación demuestra que si una persona, indistintamente del género, bebe siete vasos de vino a la semana reduce su riesgo de padecer diabetes entre un 25 y un 30% en comparación con las personas que beben menos de una copa. La cerveza, sin embargo, no afecta a las mujeres en comparación con los hombres, a los cuales sí les disminuye la probabilidad de padecer diabetes en un porcentaje del 21%.
Se cree que el efecto está relacionado con la presencia de polifenoles en el vino, unas moléculas que ayudan al cuerpo humano a manejar mejor los niveles de azúcar en la sangre. Los expertos también han visto en el mismo estudio un menor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Si bien el consumo de alcohol puede tener algo positivo, no hay que tomarse el alcohol como algo cien por cien beneficioso para nuestro organismo. El consumo de cualquier cantidad de alcohol aumenta el riesgo de hasta 50 enfermedades gastrointestinales, por ejemplo.