La leche de camella contiene 10 veces más hierro que la de vaca. También es rica en vitaminas B, C, y baja en grasa saturada
La FAO considera que la comercialización de los productos lácteos de camella ayudaría a mejorar y aumentar el suministro de alimentos para regiones áridas en desarrollo. Los anticuerpos presentes en esta leche puden ayudar a combatir enfermedades como la hepatitis, según indican algunos estudios científicos.
Este tipo de leche es ampliamente consumida en países árabes y africanos.