Los terrícolas hemos estado enviando sondas para explorar nuestro satélite desde 1959, sin embargo, en estos 57 años, el lado oscuro de la Luna se ha mantenido al margen de los ojos humanos. Ahora, China quiere terminar con ello.
Según los medios estatales chinos (la Agencia de Noticias Xinhua), el país asiático aspira ir al lado oscuro de la Luna en 2018, según lo informado por Reuters. Chang’e-4, una sonda no tripulada y nombrada así por una diosa mitológica china de la Luna, explorará y estudiará la geología de las tierras lunares desconocidas.
Este lado de la Luna, que nunca ‘mira’ hacia la Tierra, se ha podido observar alguna vez gracias a algunas naves espaciales. Las dos primeras fotografías fueron tomadas en 1959, cuando la Unión Soviética desplegó su nave Luna 3.
El presidente Xi Jinping ha hecho de la exploración espacial una prioridad para China, con la esperanza de utilizar el programa especial como una demostración de su creciente destreza económica y tecnológica. Hasta el momento, sus misiones han sido acusadas de ser simplemente imitaciones de otras misiones hechas por los rusos o los estadounidenses. En embargo, si el Chang’e-4 es un éxito, el gigante asiático se consolidaría como un país nuevo e importante en el juego de la exploración espacial.
Para poder explorar el lado oscuro de la Luna, tienen que crear un elemento (satélite o nave espacial) para que orbite en nuestro satélite para que las señales puedan ser transmitidas, ya que si no, éstas serían «bloqueadas» por la posición lunar. China quiere construir allí, para abrir una nueva vía de investigación que le proporcionará una visión más clara del universo.
