Es importante mantener una buena relación con la naturaleza; ella nos da la vida, los recursos y nosotros no hacemos más que atacarla, modificarla y aprovecharnos de ella llevándola a extremos a los que jamás ha sido expuestos. Estos actos un día nos pueden salir caros y quizá ya estemos entrando en tiempo de descuento como para poder actuar a tiempo y poner solución a nuestro maltrato.
Por suerte, hay ciertas construcciones que intentan respetar la naturaleza lo máximo posible. Un buen ejemplo son los puentes naturalistas que se pueden observar en ciertas partes del mundo. El ejemplo de la foto de más arriba lo podemos encontrar en Birkenau, Alemania.
Anteriormente, al construir una carretera o autopista se arrasaba con toda montaña, prado o bosque que hubiera por delante, afectando tanto a la flora como a la fauna impidiendo que se desplace y se aisle en determinada zona sin poder disponer de sus recursos necesarios para vivir, o que falleciese atropellado a la hora de cruzar la calzada.
Ahora, sin embargo, en algunos países europeos y americanos han empezado a construirse puentes que respetan la construcción de la carretera y también a los seres vivos que allí habitan. La partes superiores de estas construcciones son construidas con materiales adoptados de su alrededor y unen ambos ladas de la calzada para que la fauna que allí vive pueda cruzar sin poner en riesgo su vida y así mantener una vida parecida a la que había antes de que se iniciase la construcción y no tener que abandonar su territorio.
Aquí os dejamos unos ejemplos más de estos puentes que respetan la Naturaleza:
