El caracol arcoiris, considerado el caracol más bello de la Tierra.
Caracterizado por decorar su concha con extraordinarios colores, el caracol arcoiriris es considerado el caracol más bello del mundo. Es más, muchos científicos lo han catalogado como una de las especies más hermosas de la fauna mundial. Es único y exclusivo de Cuba, está fuertemente ligado a su cultura local y sirve de inspiración para innumerables obras de arte y leyendas populares. Es símbolo natural y cultural de Baracoa, una ciudad de la provincia de Guantanamo, plagada de ríos, arroyos y cañadas. De hábitos arborícolas, vive en árboles y plantas, preferentemente en la planta de café, y se alimenta de hongos y líquenes fijados en las cortezas de los árboles. Es particularmente sensible a los cambios de humedad, luminosidad, temperatura y salinidad del ambiente, por lo que no ha podido adaptarse a otros territorios.
Su denominación científica es Polymita picta. La palabra Polymita quiere decir «muchas rayas«, por ser ésta la propiedad más generalizada en sus conchas, aunque algunas no presentan raya alguna. Picta significa «pintada» o «colorida«.
Las especies de Polymita, al igual que un elevado porcentaje de los moluscos terrestres de Cuba, son pulmonados y hermafroditas. Es decir, están capacitados para respirar directamente el aire a través del pulmón, y en cada individuo se hallan reunidos los órganos reproductores masculinos y femeninos.
La época de reproducción generalmente coincide con el período de lluvias; cuando dos individuos se unen y efectúan su fecundación cruzada, ambos quedan fecundados, pues son hermafroditas. Después que los huevecillos han alcanzado su madurez en el interior del animal, éste desciende por las ramas o tronco de la planta hasta el suelo. Allí cavará pequeños huecos en la tierra, y depositará cuidadosamente sus huevos, o se irá a colocarlos entre las hojas caídas. Varios días después, saldrán los pequeños animalitos, de unos 2 ó 3 milímetros de tamaño, y buscarán el tronco de una planta para trepar en busca de hongos o líquenes e iniciar su vida arborícola.
Como ya hemos mencionado Polymita es considerado un símbolo cultural de Baracoa. Es tal la admiración que han sentido y sienten los habitantes de este pequeño y verde pueblo por tan bellas criaturas, que existe una leyenda en su honor:
Ella cuenta de los amores de una bella india y su cacique, quien para conquistarla sin tener perlas ni joyas, quiso ofrecerle un regalo único. Y salió un día a apresar, los colores del sol, el verde de las montañas, el rosado de las flores, el blanco de la espuma de la mar, pero al sorprenderle la oscuridad no pudo aprisionar el azul del cielo, conformándose con el negro de la noche. Los colores fueron aprisionados en la concha de un caracol. Ella, deslumbrada al contemplar tan singular creación, le imprimió la cadencia de su baile, la ternura de sus palabras y la benevolencia de su ser. Por eso se afirma que son las polymitas las joyas naturales de Cuba y ofrecen gran beneficio a las personas, aunque no existan azules.
La colección más importante del país sobre malacología y, dentro de ella, una de las más ricas del mundo de la especie Polymita picta, se encuentra expuesta en el Museo de Ciencias Naturales de la provincia de Holguín.