¿De donde viene la expresión «echar un polvo» ?
La expresión «echar un polvo» para referirse al acto sexual, es un modismo ampliamente utilizado cuyo origen tiene divididos a los propios expertos en etimología. La procedencia de esta expresión no esta del todo clara pero se conocen dos posibilidades totalmente factibles:
En los siglos XVIII Y XIX era costumbre el consumo de tabaco vía nasal. Este tabaco en polvo también llamado «»Rapé», puede ser la clave del origen de la expresión “Echar un Polvo”. Cuando se esnifa rapé son comunes los estornudos, que resultaban molestos sobre todo para las personas que no lo esnifaban. Es por ello que las personas que consumían tabaco en polvo en las fiestas y reuniones de sociedad, con la intención de no molestar, se retiraban a otra estancia para «echarse unos polvos a la nariz».. Con el tiempo, esa costumbre comenzó a utilizarse como excusa para ausentarse de la reunión para poder tener encuentros sexuales. Así que era una excusa perfecta para que las parejas pudieran ir a otra habitación para mantener sus relaciones íntimas durante las fiestas sin levantar sospechas. De este modo puede que se asociara el hecho de “van a echar un polvo” (refiriéndose al rapé) con mantener relaciones sexuales.
Otro de los posibles orígenes de esta curiosa expresión se encuentra en la famosa fórmula litúrgica “Memento homo, quia pulvis es, et in pulverem reverteris” o “Somos polvo, del polvo venimos y en polvo nos convertiremos”. Concretamente la afirmación “del polvo venimos” da pie a interpretar polvo como un eufemismo de relación sexual: De las relaciones sexuales venimos… Lo que convierte el «polvo» en simónimo de acto sexual. De ahí puede haber evolucionado la expresión hasta tal y como la conocemos hoy en día: Echar un polvo.
¿Y tu, conoces alguna otra teoría sobre el origen de la expresión «echar un polvo»?