El espectacular Parque Geológico Zhangye Danxia, en China, es conocido por sus impresionantes montañas de colores dignas de un mundo de fantasía. Consideradas sagradas, las montañas de Danxia esconden entre sus ondulantes formaciones rocosas varios templos, cuevas y capillas.
Danxia no es un lugar, sino nombre con el que se conoce un tipo de paisaje en China caracterizado por rocas prominentes con relieves muy acentuados.
Este espectáculo de colores aleatorios en los estratos se fue formando por los sucesivos depósitos de minerales de diversa pigmentación en las capas rocosas. En 24.000 millones de años, los procesos geológicos, el viento y la lluvia terminaron modelando ésta maravilla de formas y colores extraños, entre valles, barrancos y buenos miradores para apreciarlas.
La explicación a la existencia de estos paisajes está en las fuerzas de origen endógeno que han levantado las montañas, es decir, la tectónica terrestre. Después de la compactación de las capas de arenisca debido a la presión que provoca el peso de la capa superior sobre la inferior, la colisión indo-australiana y la placa tectónica euroasiática elevó estas capas
rompiendo con la homogeneidad cromática del suelo y dejando al descubierto este paisaje surrealista que podemos disfrutar hoy.
A pesar de estar ubicadas en una zona de climatología muy árida, en la provincia de Gansu, estas curiosas montañas de aspecto escarpado están recorridas por el serpenteante río de Jinjiang, que remata el paisaje con espectaculares cascadas en los acantilados.
Las montañas de Danxia han sido y son muy estudiadas, puesto que constituyen una oportunidad única para entender los movimientos y la dinámica de la Tierra a lo largo de las diferentes eras geológicas. Por su singularidad estos extraordinarios paisajes que se extienden a lo largo de 300 km, han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde el año 2010.
