En 1970 Claire Sylvia padecía graves problemas de salud, fue sometida a un trasplante de corazón y otro de pulmón, su donante fue un joven de 18 años que falleció en un accidente de moto.
Tras la operación empezaron a gustarle cosas que antes detestaba sobre todo en comidas, tenía recuerdos que no reconocía como suyos y curiosamente si podían ser del muchacho donante. Finalmente escribió un libro llamado A change of Heart.
Esta serie de hechos no es tan extraña se basa en la memoria celular, todas y cada una de las células de nuestro cuerpo albergan información personal, gustos, vivencias, recuerdos… Aunque este caso aparece sobretodo en casos de trasplante de corazón.
Recientes investigaciones creen que el cerebro es el dueño del sistema nervioso, a modo de cerebro. Candance Pert, una investigadora, añade que cada célula tiene su propia mente y que guarda toda la información del donante.
La ciencia médica aún no está preparada para afirmar la teoría de la memoria celular pero se sigue investigando sobre ello.
