La cueva de Naica
Una de las maravillas que nos ofrece la naturaleza en nuestro planeta es la cueva de Naica, hallada a 300 metros bajo tierra en la ciudad mexicana de Chihuahua bajo una mina de plata y plomo en mitad del desierto.
Es conocida como la cueva de cristales gigantes de Naica ya que alberga los mayores cristales de selenita, una variedad del yeso, que se conocen hasta hoy. La cueva fue descubierta por casualidad hace exactamente 14 años mientras unos obreros hacían una nueva galería para la mina.
Lo curioso de esta mina es que lo cristales de selenita encontrados hasta entonces tienen pocos centímetros de longitud pero en este caso sus dimensiones son colosales.
En la Universidad de Tohoku (Japón) dan como explicación a este acontecimiento las elevadas temperaturas a las que se encuentra la cueva, unos 50 grados centígrados pero también a su gran nivel de humedad que alcanza niveles del 90%. Tras todas las investigaciones se ha sabido que el nivel de crecimiento de estos cristales es del grosor de un cabello por siglo.
El problema ahora es que una vez descubierta la cueva y bombeada el agua que había en ella el crecimiento de los cristales se ha detenido, los científicos creen que hasta que no se vuelva a inundar la cavidad el proceso no va a continuar.