Cuando recordamos, el cerebro tiende a acordarse no sólo del recuerdo en sí sino también de lo que hacíamos en aquel momento, lo que se denomina recuerdos flashbulb.
Un estudio de la Universidad McGill demuestra que los recuerdos no son tan perfectos como aparecen en nuestra mente. De hecho, según el investigador Nader, los recuerdos son modificados por la mente en el momento de recordarlos, sobre todo los recuerdos flashbulb, los más visibles. Estos suelen ser los más importantes, acontecimientos que nos marcan, por ejemplo la caída de las Torres Gemelas.
Para generar un recuerdo es necesario que conecten las neuronas, que lo hacen de manera diferente cada vez que recordamos algo, lo que conlleva que cada vez sea con un matiz diferente, algo que hace que los recuerdos se modifiquen. Por ello, cada día que pasa, se los recuerdos se hacen más borrosos, porque vamos construyendo una realidad que no ha existido.
