Delfín de Araguaia (Inia Araguiaensis), así es como se llama la nueva especie de delfín de agua dulce descubierta en Brasil.
En medio del Amazonas (el mayor bosque tropical del mundo) discurre un río de más de dos mil kilómetros, cuyas aguas cruzan la parte central de Brasil hasta desembocar en el Atlántico, el río Araguaia, río que ha dado nombre a esta nueva especie.
En 1918 se descubrió la existencia de delfines de agua dulce por primera vez. Casi un siglo después se ha descubierto una nueva especie. Los delfines de río, a diferencia de los de océano, tienen un largo y fino hocico dentado que les permite cazar con facilidad los peces. Además, su cuello, les permite mayor movilidad ya que sus vértebras cervicales no están fusionadas.
El descubrimiento se ha realizado casi por casualidad. El equipo, formado por seis científicos de la Universidad Federal del Amazonas (UFAM), tenían como objetivo estudiar a las dos especies de delfines existentes en la zona el Inia geoffrensis y eI Inia boliviensis.
“Gran cantidad de la fauna del Araguaia se comparte con la cuenca del Amazonas, pero las dos cuencas se han separado desde la transición del Plioceno al Pleistoceno. Así que decidimos ver si los delfines también eran distintos”, señala Tomas Hrbek, director de la investigación.
“En primer lugar nos sorprendió», afirma el científico. “Para asegurarnos y confirmar que habíamos dado con una nueva especie, realizamos los experimentos con el ADN mitocondrial. Después de los experimentos replicados, decidimos usar marcadores nucleares -un análisis en el laboratorio sobre un segmento del cromosoma para identificar las partes que tienen en común dos individuos- y estudiar la morfología”.
En total se recogieron muestras de ADN mitocondrial de 121 delfines. Tras comparar los resultados, pudieron observar las diferencias que existían del nuevo grupo localizado con las otras dos especies.
“Tienen principalmente menos dientes, pero la muestra para el análisis morfológico no permite que probemos esta estadística, y algunas pequeñas diferencias en la forma y tamaño del cráneo y las mandíbulas”, detalla el científico.
Aunque se acaba de descubrir, esta especie surgió hace casi dos millones de años y cuenta con 1.500 ejemplares.
