Un hombre llamado Joshua Norton I fue el único Emperador que se ha conocido en la historia de Estados Unidos, era un verdadero
maestro del engaño, se hizo pasar por monarca y gran parte de la población le dio su lealtad hasta la fecha de su muerte.
“En la petición y el deseo perentorio de una gran mayoría de los ciudadanos de estos Estados Unidos, yo, Joshua Norton […] me declaro y proclamo emperador de estos Estados Unidos […]“ Esto era lo que ponía en la carta enviada a San Francisco en 1859. Pero Joshua Norton no sólo se proclamó Emperador de los Estados Unidos de América sino que también “Protector de México”.
Muchos de los que formaban el pueblo le siguieron sin dudarlo, en nuevo Emperador dictó normas ridículas, pero también es cierto, que otras muy interesantes. Por ejemplo, proclamó una multa de veinticinco dólares a cualquier persona que se refiriera a la ciudad con el nombre de Frisco, también pedía de 25 a 30 centavos semanales a todos los tenderos y 3 dólares a los bancos, la ciudad se reía de estas nuevas leyes, pero por mucho que se riesen terminaban pagando.
El Emperador también propuso iniciar las obras de un puente colgante, que nunca empezó a hacerse hasta que muchos años después, en ese mismo lugar, construyeron el Golden Gate.
El Emperador Norton I, gobernó durante 21 años, hasta 1880, fecha de su muerte. A su funeral asistieron más de 30 mil personas. Le fue colocada una lápida que dice: “Emperador de los Estados Unidos y Protector de México”.
