Bob y Linda son una pareja que parecen complementarse a la perfección, a Linda le diagnosticaron un cáncer de mama y su marido ni corto ni perezoso comenzó a hacerse fotos con un tutu rosa para hacer reír a su mujer.
“Cuando Linda empezara el tratamiento, se llevaría las imágenes en su teléfono, las mujeres las mirarían, se reirían de ellas y pasarían el rato”, afirma este gran hombre.
Todas las mujeres con las que su esposa tomaba el tratamiento agradecieron el gesto por su parte, lo que llevó a Bob a continuar con sus fotografías.
Desafió a la fría nieve e incluso viajó a Italia, siempre en búsqueda de formas creativas de fotografiarse con su tutu rosa, haciendo así reír a su esposa y amigas enfermas.
“Por extraño que parezca, su cáncer nos ha enseñado que la vida es buena, que lidiar con ella puede ser duro, y que a veces lo mejor -no, lo único- que podemos hacer para enfrentar otro día es reírnos de nosotros mismos y compartir la risa con los demás”.
Todo un modelo de persona.
