Una mujer brasileña recibió el mayor susto de su vida cuando vio a un cuerpo salir de una tumba. La mujer acudió al cementerio de Ferraz de Vasconcelos, en Sao Paulo, para visitar el nicho de un familiar cuando, por casualidad, observó como una tumba se abría y unos brazos comenzaban a salir de ella.
La mujer confiesa haber sufrido el mayor susto de su vida en el cementerio brasileño. Al ver levitar un cuerpo su primera razón fue echar a correr sin mirar atrás. Al cabo de unos segundos, en medio de la irracional situación, comenzó a observar que no era más que un pobre hombre vivo semienterrado que reclamaba ayuda. Inmediatamente llamó a las emergencias y sacaron al hombre de aquel infierno. Se encontraba consciente pero desorientado.
El relato registrado en el boletín de servicio afirma que el hombre confesó que se enterró porque no soportaba tantos problemas como tenía y necesitaba ponerle fin a su vida. Además un sobrino del sepultado dijo que su tío sufría trastornos psiquiátricos. Por otra parte, el Ayuntamiento explica que el varón de 41 años de edad se vio involucrado en una discusión en la que fue golpeado y perdió el conocimiento desvaneciéndose y los asaltantes decidieron enterrarle sin saber si verdaderamente había fallecido.
Tras el trágico suceso fue trasladado al hospital donde se recupera poco a poco de la tortura que ha sufrido.
