¿Siempre nos quedará París?
Puede que para todos menos para los japoneses. Los habitantes del país nipón sufren una extraña enfermad denominada ‘síndrome de París’, que les provoca una profunda conmoción al llegar a la capital francesa y no encontrarse con la ciudad idealizada que las películas muestran.
Miles de japoneses visitan París cada año y muchos, la mayoría mujeres, sufren una crisis nerviosa al no encontrarse la metrópolis romántica e idílica que han mostrado películas como «Amelie», o «Antes del Atardecer», sino, una ciudad moderna con todas sus consecuencias: ruido, estrés, suciedad, barrios marginales…
El ‘shock’ que sufren los japoneses al encontrarse con la cruda realidad es tal, que puede provocarles alucinaciones, psicosis, taquicardias o sudores fríos. Incluso para los casos más extremos, la propia Embajada de Japón ha puesto un servicio de atención 24 horas para los que padecen esta enfermedad, que puede acabar con su repatriación.
Este trastorno fue identificado en 1968 cuando el psiquiatra japonés Hiroaki Ota describió una nueva enfermedad que afectaba a los turistas japoneses más jóvenes que habían visitado recientemente “la ciudad de la luz”.