Esta mujer de origen georgiano tomó la decisión de embalsamar el cadáver de su hijo, quien falleció en el año 1995 a la edad de 22 años y acababa de nacer su hijo.
La mujer encontró el método de que su nieto pudiera ver a su padre tal y como estaba en el momento de que el naciera,”Él quería que lo conociera así. Creo que desde ese momento el chico empezó a amarlo”, afirma la mujer.
El cadáver del joven se encuentra en una caja de madera en el sótano de la casa, y desde el año de su muerte se encarga de humedecerlo con ese alcohol y de cambiarle la ropa en su cumpleaños,”Desde hace cuatro años que no lo hago porque ya no se puede”.
Sin embargo la mujer pasó unos días en cama debido a una enfermedad, lo que fue devastador para el cuerpo de su hijo,”Joni es buenmozo. Cuando use las sábanas mojadas en alcohol su piel se volverá blanca de nuevo y todo estará normal otra vez”.
