Torturas antiguas VI, El Aplastapulgares
En este caso el titulo es bastante descriptivo, esta tortura es muy antigua y simple, pero a su vez es también muy efectiva.
Para llevar a cabo esta tortura se usaban distintos dispositivos mecánicos, esto consistía en el aplastamiento de las uñas, las falanges y nudillos de una forma muy lenta y poco a poco.
Esta tortura era especialmente cruel porque a la víctima le provocaba un gran dolor durante varios días pero ese dolor no era mortal, por lo que hasta que no se retirara el aparato el dolor no cesaba.
Estos aparatos podían regular el nivel de aplastamiento hasta llegar el punto de una mutilación total del miembro.
En los crímenes mas graves la tortura era ejecutada de una forma muy lenta, para provocar el mayor dolor durante el mayor tiempo posible, se comenzaba aplastando y destrozando las uñas de ambos dedos, después se pasaba a las falanges y se terminaba por los nudillos, destrozando ambos dedos y la capacidad de las dos manos para agarrar objetos que necesitaran el uso de los pulgares.