Ha habido casos de robos con métodos raros, como el del ladrón que entro a robar cubierto de limón porque creía que así era invisible a las cámaras de seguridad, pero lo de este hombre ya es exagerado.
Robó en un domicilio con una pistola de agua cargada con semen.
Eric Michael de 21 años de edad pensó que sería muy letal un chorro de semen en la ropa de sus víctimas, y que así le pagarían la deuda que tenía con ellos debido a las drogas.
Después del esfuerzo que supongo supuso rellenar la pistola, no encontró a su víctima en ninguna de las habitaciones, así que lo pago con el primero que encontró, le lleno la cara de liquido de amor y expresó; “Ahora estás como el resto de mis prostitutas, todo cubierto de semen“.
Tras eso él y su banda salieron de la casa robando todo lo que encontraron de valor, ahora está condenado a 18 meses de cárcel sin fianza.
