Una reina tailandesa murió ahogada debido a que los súbditos no podían tocarla y no pudieron por ello rescatarla
Sunandha Kumariratana (noviembre de 1860 – mayo de 1880) era una de las hijas del rey Rama IV de Siam y la princesa consorte Piam. Fue medio hermana, la primera reina consorte y una de las cuatro reinas del rey Rama V, dos de ellas eran sus hermanas pequeñas.
La reina murió ahogada cuando su barco se hundió mientras se dirigían al Palacio de Verano. A pesar de la gran cantidad de gente que presenció la tragedia, nadie le rescató. Esto se debió a que estaba prohibido bajo pena de muerte tocar a la reina, ni siquiera para salvarle la vida. El consternado rey erigió un monumento memorial dedicado a la reina y al hijo no nato que llevaba en su vientre.