La susodicha mujer se llama Carol Schnuphase y tiene 47 años, le administraba fármacos a base de opio en alimentos para dársela a su hijo y éste pareciera enfermo, además le cortaba el pelo y le afeitaba hasta las cejas para hacer creer a las personas que su hijo estaba muriendo de leucemia.
Su actuación fue tan convincente que recibió hasta 7.500 dólares de asociaciones religiosas, hasta que finalmente su hermana la desenmascaró.
Despues de aquello fue juzgada, condenada a 1 año de prisión y su hijo fue dado en adopción. El abogado de la madre argumentó que Schnuphase se comportó indebidamente porque estaba “desesperada” después de la muerte súbita de su esposo y la reciente pérdida de su empleo.
