Según un estudio de la Universidad de Liverpool (Reino Unido), se asegura que la prosa de los escritores clásicos tiene efectos beneficiosos sobre la psique, y que su lectura estimula el cerebro moral captando la atención del lector y provocando momentos de autorreflexión.
Los científicos monitorizaron el cerebro de 30 voluntarios mientras leían piezas clásicas de la literatura inglesa. Detectaron que la actividad eléctrica cerebral aumentaba a medida según la prosa se complicaba.
En concreto al leer poesía escrita por el poeta romántico inglés William Wordswort se incrementaba la actividad en el hemisferio derecho del cerebro, concretamente en el área vinculada a la memoria autobiográfica.
