El primer objeto supersónico creado por el hombre, podría ser el látigo.
El chasquido de un látigo, movido de forma correcta, es un pequeño boom ultrasónico. El final del látigo, conocido como chasqueador, se mueve más rápido que el sonido, eso crea un boom ultrasónico. El látigo es, posiblemente, el primer objeto creado por el hombre en romper la barrera del sonido.
El látigo reduce su diámetro desde el mango hasta el chasqueador. El chasqueador tiene una sección mucho menos ancha que el mango. Cuando el látigo se «sacude» la energía es tranferida a lo largo del estrechamiento del látigo. De acuerdo con la fórmula (si el trabajo del látigo se mantiene constante) por energía cinética (E_k= mv^2/2), esto es porque, al reducir la masa del látigo, acelera su velocidad, y por esto, al final del látigo, supera la velocidad del sonido provocando el boom ultrasónico.