La Antártida tiene un solo insecto nativo
Este curioso insecto denominado «El Belgica Antártica» es el único insecto nativo de la Antártida, suele medir los 12mm de largo, este insecto no tiene alas lo que facilita que el viento no lo desplace.
Su pequeño cuerpo ha evolucionado de tal manera que los fluidos corporales pueden congelarse sin ocasionarle la muerte, puede llegar a vivir hasta 2 años con los fluidos corporales congelados.
Su color negro le ayuda a absorber el calor, aunque su cuerpo curiosamente puede aguantar cambios drásticos de la salinidad y el pH, puede sobrevivir varias semanas sin oxigeno y puede soportar una deshidratación del 35%.