La obsesión con tener un bronceado perfecto se denomina tanorexia
Se trata de un trastorno de la percepción de la imagen propia, al estilo de la anorexia. El no conseguir un tono lo suficientemente oscuro de piel genera en estas personas angustia. Además, este trastorno psicológico (obsesivo-compulsivo) suele venir acompañado de lesiones cutáneas de mayor o menor gravedad. La razón de que tomar el sol o broncearse en cabinas se haga tan adictivo se debe a que los rayos UVA desencadenan la producción de endorfinas, unas sustancias químicas cerebrales que producen sensación de euforia y alivian el dolor.