El hallazgo de 10 mil cerebros
Era una especie de rumor en Dinamarca. Pero esta noticia con tintes siniestros se convirtió en realidad. El hallazgo de 10 mil cerebros en una universidad de la ciudad de Odense llamó la atención de la prensa. ¿Cómo sucedió esto?
Empezó en 1945, a finales de la Segunda Guerra Mundial. Erik Strömgren era un eminente psiquiatra. Desarrolló un proyecto que le permitiera estudiar las causas de las enfermedades mentales de miles de pacientes.
Sin consentimiento
Para la época, las autopsias en pacientes psiquiátricos se practicaban de forma rutinaria y sin grandes investigaciones. Pero al médico Strömgren se le ocurrió una idea. Extraer los cerebros de los cadáveres y conservarlos para buscar las causas de la esquizofrenia, demencia, depresión y bipolaridad.
No había ley que restringiera el uso de los cerebros. En Dinamarca los pacientes diagnosticados con enfermedades mentales debían tramitar un permiso especial para poderse casar. Esto se abolió en 1989.
Sin el consentimiento de los difuntos o sus familias, se extrajeron un total de 9 mil 479 cerebros. Es la mayor colección en todo el mundo. Se conservaron en recipientes blancos con formol. Thomas Erslev es un historiador de la ciencia médica y asesor de investigación en la Universidad de Aarhus. Dijo que casi la mitad de los pacientes psiquiátricos muertos después de la Segunda Guerra Mundial fue ‘despojada’ de su cerebro.
Jesper Vaczy Kragh, historiador de psiquiatría, explicó los detalles del proyecto. «Era investigación experimental. Pensaban poder descubrir alguna cosa sobre la ubicación de las enfermedades mentales», explicó.
Traslado complejo
En 1982, el país europeo decidió ponerle fin a este tipo de prácticas. El tema fue epicentro de debate por la profanación de cadáveres que se ejecutó durante cuatro décadas. La falta de financiación y el olvido del proyecto fue clave para que el secreto saliera a la luz. En 2018 contactaron al patólogo Martin Wirenfeldt Nielsen para ofrecerle la colección.
«La primera vez que me enteré de su magnitud fue cuando decidieron trasladarlo aquí. Me pregunté: ¿cómo se pueden trasladar casi 10 mil cerebros?”, explicó. Fueron transportados en baldes blancos, e identificados con un número hecho con marcador negro.
El hallazgo de 10 mil cerebros es también una posible oportunidad de estudio. Podrían ser claves para saber más de las patologías neurológicas y mentales.