Las vértebras ensartadas en postes
Hallazgo arqueológico inédito
Al parecer, era una práctica de los pueblos indígenas de Perú hace casi 600 años. Así unían los restos de sus antepasados, profanados por los conquistadores españoles. Los arqueólogos se sorprendieron al ver las vértebras ensartadas en postes.
Costumbre compartida
Se exploraron 664 tumbas en una zona de 40 kilómetros en el Valle de Chincha en Perú. Llegaron a documentar 192 ejemplos de postes con vértebras enroscadas. ¿Cómo surgió esta práctica? Tal vez con el fin de volver a reunir los restos dispersos de los muertos. Los conquistadores españoles habían saqueado antes las tumbas.
¿A qué fecha pertenecen? Están entre 1450 y 1650 dC. El Imperio inca se estaba desmoronando y los colonizadores europeos estaban consolidando su poder. Había una frecuente profanación de las tumbas de los locales por parte de los españoles. Los chinchas pudieron ensartar espinas dorsales en juncos para reconstruir a sus antepasados. Lo cree Jacob Bongers, de la Universidad de Anglia del Este en el Reino Unido.
«Hay 192 de estos y están muy extendidos. Los encontramos en todo el Valle de Chincha. Múltiples grupos de personas se coordinaron y respondieron de manera compartida», dijo al portal LiveScience.
Reconstruyendo la memoria
La mayoría estaba alrededor de tumbas de piedra grandes y elaboradas, llamadas chullpas. Típicamente albergaban múltiples entierros. Una de ellas contenía restos de cientos de personas. Eran parte del Reino Chincha, «una sociedad rica que dominó el Valle de Chincha antes del Imperio Inca».
La mayoría de los postes contenían huesos pertenecientes a un solo individuo. Aunque las espinas dorsales estaban incompletas. Se enhebraban las vértebras de la columna después de que los cuerpos se descompusieran.
El Reino chincha tuvo una población de alrededor de 30.000 habitantes en su esplendor. A finales del siglo XV, se fusionó con el Imperio Inca. La llegada de los europeos supuso su inminente desaparición. El saqueo de las tumbas chinchas fue intenso. Las vértebras ensartadas en postes fueron un intento de recomponer en algo su memoria.
Los hallazgos fueron publicados el 2 de febrero en la revista Antiquity.