Inventan un marcapasos cerebral para tratar la depresión severa
La depresión severa es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo. Con síntomas como no tener humor, falta de interés por vivir, carecer de energía, sueño y alimentación disfuncionales además de una tristeza permanente. El marcapasos cerebral puede ser la solución al problema.
No es una afección pasajera, por el contrario, si no se trata puede agravarse. Para solucionar casos de depresión severa, se realizó con éxito un implante de un marcapasos cerebral.
Implantan el primer marcapaso para tratar la depresión severa
La operación la realizó un grupo de científicos de la Universidad de California en San Francisco. El equipo de investigadores en neurociencia, implantó con éxito y por primera vez un dispositivo para tratar la depresión. La paciente, después de ser implantada, mostró señales optimistas de recuperación.
Es una mujer de 36 años, llamada Sarah que sufre desde que era solo una niña de depresión severa. Durante muchos años, fue tratada con distintas terapias sin éxito. Es algo persistente en personas con depresión severa, un 30% de ellas, son resistentes a los tratamientos conocidos.
Por esta razón, el equipo de científicos nombrado diseñó una especie de marcapasos para el cerebro. El implante resultó todo un éxito en la paciente. Esto significa una esperanza para miles de personas con este tipo de padecimiento. Sin embargo, cada “marcapasos” debe ser diseñado a medida para cada paciente.
La depresión severa puede tener una solución
Los resultados de la investigación se publicaron en la revista Sciecie Alert. Sarah, que solo se conoce por su nombre de pila, participó junto a otros pacientes del estudio. Tenía una depresión muy severa, que la llevó a no apreciar su vida.
Junto al equipo de científicos, el grupo de pacientes tuvo varias reuniones. En ellas se explicó en que consiste el tratamiento. Un implante de estimulación cerebral profunda para mejorar los síntomas de la depresión severa.
Como es común, muchas personas no son proclives a tener que llevar un chip implantado en su cerebro. No obstante, la estimulación cerebral profunda mediante implantes tuvo éxito en el pasado con enfermedades como el Parkinson o la epilepsia. Aunque la depresión severa es por mucho más complicada de tratar que esas enfermedades. Aunque el equipo de la UCSF hizo un cambio radical en la terapia.
Algunas características del nuevo dispositivo que utilizan en el tratamiento
En lugar de centrarse en una zona específica del cerebro, identificaron en qué zona cerebral de Sarah estaba su problema. Utilizaron un biomarcador para identificar la zona y modificaron el dispositivo para que actúe allí específicamente.
Mediante un cable con un electrodo, se conectó al cerebro de Sarah en el lugar indicado por el biomarcador. Otro cable se conectó en el circuito de la depresión. Este cable enviaba al cerebro una pequeña porción de electricidad durante seis segundos.
Aunque se necesitaron varias pruebas para identificar la zona cerebral correcta, lo lograron. El implante de Sarah fue todo un éxito. Aunque se trata de un solo paciente todavía, es muy prometedor para ese 30% de pacientes con depresión severa que rechazan las terapias.