Mariano Díez Tobar fue el verdadero inventor del cine
El cinematógrafo o cine, como más lo conocemos fue un invento de los hermanos Lumiere. Esto es lo que nos cuenta la historia, sin embargo, no es del todo cierto. La primera proyección, de los hermanos Lumiere, fue en el Salón Indio del Gran Café de París. Las personas reunidas allí vieron la proyección de la primera “película” de la historia. Esto ocurrió el 28 de diciembre de 1895. Sin embargo, el sacerdote Paúl Mariano Díez Tobar, había hecho lo mismo, seis años antes que los Lumiere. Su absoluto desinterés por sus inventos, llevaron a que los hermanos franceses se llevaran la fama.
Mariano Díez Tobar tenía una mente privilegiada
Mariano Díez Tobar nació en Tardajoz, Burgos, el 21 de mayo de 1868. Poseía una inteligencia superior y por eso los sacerdotes de la escuela a donde concurría, lo llevaron a otro colegio. Fue en la localidad de Las Quintanillas, aunque para llegar allí, debía caminar 10 kilómetros cada día.
A los 14 años de edad, se trasladó para estudiar en el Seminario de Singüenza, en Guadalajara. Allí se destacó en el estudio de la física y las matemáticas. Ventaja que no podía aprovechar porque en una institución religiosa, esto no era bien visto.
En 1890 se traslada al colegio de Murguía, Álava, donde su interés científico se incrementó. Le interesaba todo lo concerniente a la imagen y el sonido. Era un inventor nato, aunque sus inventos solo los desarrollaba para demostrar las leyes de la física.
Inventó muchas cosas, pero no le interesaba patentarlas
Fue responsable de más de 15 creaciones, pero por su total desinterés solo patentó uno. Este fue el rotógrafo de curvas. En ingeniería, lo usaron para dibujar curvas especiales perfectas. Otro de sus inventos increíbles fue un reloj de cuerdas que se cargaba con la voz humana.
Asimismo dio su consentimiento para que sus inventos, los pudieran aprovechar otras personas. Como el caso del elliograutógrafo, que es un aparato que transformaba la voz humana en texto con una máquina de escribir. Lo aprovechó la empresa italiana Olivetti.
El cine fue uno de sus inventos
En 1889, Mariano Díez Tobar realizó una disertación que tenía el título de “el cinematógrafo”. En esa charla, compartió la idea de como realizar una imagen en movimiento. Además, detalló en que habían fracasado quienes lo intentaron. Finalmente la conclusión de Tobar era introducir una intermitencia entre un fotograma y otro, para crear una imagen de movimiento en la mente del espectador.
Entre los asistentes a la conferencia, se encontraba Flamereau, que era el representante de los hermanos Lumiere. Cuando Flamereau regresó a Francia, mandó a construir la máquina con las especificaciones de Tobar. El resto es lo que cuenta la historia, con los dos hermanos como los inventores del cinematógrafo.
El desinterés por la fama y la riqueza, hizo que cediera sus ideas a otras personas. Tan es así que los hermanos Lumiere invitaron al sacerdote a la primera proyección realizada en Madrid. Mariano Díez Tobar murió siendo un desconocido para la historia el 25 de julio de 1926. Pero ahora todos sabemos cuál fue la realidad.