Cada setiembre se celebra el Día Internacional de las Lenguas de Señas
Desde el 2018 se celebra este día con el fin de concientizar a los Estados. La enseñanza de las Lenguas de Señas debería ser obligatoria en todo el mundo. Permitiría la integración plena de los discapacitados auditivos en la sociedad.
Las Lenguas de Señas simplifican la comunicación
Las personas con discapacidad auditiva pueden comunicarse entre sí por lenguaje de señas. Aunque en sus vidas cotidianas se les complica relacionarse con las personas que no entienden este lenguaje. Por esto, es que desde el 2018, cada 23 de septiembre se celebra el Día Internacional de las Lenguas de Señas.
Según la Federación Mundial de Sordos, en el mundo viven 70 millones de personas que padecen de sordera. Entre ellos, utilizan cerca de 300 distintas variantes de las lLenguas de Señas.
Los lenguajes de señas tienen una estructura totalmente distinta al lenguaje hablado. Existe un lenguaje de señas internacional, que se utiliza para reuniones o en viajes. Se trata de una lengua mixta, creada a partir de una combinación entre el lenguaje internacional y el agregado de otras variantes. Sin embargo, este lenguaje internacional no es tan rico en expresiones como los naturales de cada país.
Toda la sociedad tendría que saber las Lenguas de Señas
La Convención para los derechos de las personas con discapacidad, promueve su enseñanza en todos los ámbitos. Para la integración plena a la sociedad de las personas sordas.
La enseñanza en las escuelas de las Lenguas de Señas puede integrar a los sordos a la sociedad. Conocer este lenguaje por parte de personas sin discapacidad, es reconocer los derechos humanos de los que padecen sordera.
Se eligió el 23 de septiembre en conmemoración de la fundación de la Federación Mundial de Sordos que fue el mismo día pero en 1951. Se propuso en la Asamblea General de las Naciones Unidas en diciembre de 2017.
La pandemia y el barbijo complicaron la comunicación con las personas que tienen disminuida su audición
Fue muy difícil la comunicación entre estas personas y su entorno. Las Lenguas de Señas no simplificaron la comunicación de los discapacitados auditivos durante la pandemia. Un bajo porcentaje de personas lo utiliza.
La pandemia provocó innumerables problemas en las relaciones personales de todos. Sin embargo, para las personas que padecen de sordera la comunicación fue casi imposible.
A quienes no pueden oír, no les es posible comunicarse con interlocutores que usan barbijos. También se ven perjudicados cuando realizan una videoconferencia donde tampoco pueden leer los labios. Simplemente, el uso de barbijos les hace imposible saber que está diciendo la otra persona.
En algunos estados, durante la pandemia se autorizó a las personas a quitarse el tapabocas cuando se comunican con un sordo. Esto es importante para el discapacitado, porque puede leer los labios o las expresiones faciales.
La enseñanza de este lenguaje, en la actualidad solo la reciben los niños sordos. Sin embargo, sería menester que la aprendieran todos los integrantes de la sociedad. Estén en edad escolar o no.