Los océanos y mares cubren más de dos tercios del planeta y son una fuente de vital importancia para la supervivencia. No solo es fuente de alimento para el ser humano, también es fuente de energía y es elemental para la absorción de dióxido de carbono.
Su importancia indica que hay que preservarlos. Pero el ser humano es quien abusa de estos recursos y pone en peligro a todo el ecosistema marítimo. La mayor parte de los océanos y mares son aguas internacionales, que no están bajo la jurisdicción de ningún país que las regule. De esta manera, nadie puede garantizar su protección ni su cuidado.
Problemas que acosan los océanos y mares
La depredación que se realiza en la mayoría de los casos incumpliendo leyes es uno de los principales problemas. La pesca indiscriminada depreda los océanos y mares. Las empresas de pesca cada vez invierten en buques más grandes con sistemas de pesca industrializados. Son los que generan que la cantidad de peces disminuya vertiginosamente día a día.
Según los biólogos marinos, hay un excedente de barcos pesqueros y una disminución en la población de peces muy importante. A ello se le suma la muerte de mucha fauna marina, como tortugas, ballenas, tiburones y delfines. Algunos mueren por quedar enredados en redes de pesca abandonadas a la deriva. Otros son víctimas de la caza indiscriminada, resultante de fines netamente comerciales.
Otros problemas son generados por el maltrato al planeta
Otro de los peligros lo constituye la acidificación de los océanos y mares como consecuencia de la contaminación con dióxido de carbono. Los océanos absorben la mayor parte de CO₂, se produce ácido carbónico. Al bajar el pH del agua en el mar, baja también la concentración de hidrógeno, lo que en un futuro cercano perjudicará a las especies más pequeñas.
Por si esto no fuera suficiente, existe otro peligro que pone en riesgo la vida en océanos y mares. Las aguas de los océanos han elevado su temperatura, en más de medio grado en los últimos cien años como consecuencia del calentamiento global y el cambio climático. Este aumento en la temperatura provoca la muerte de los arrecifes de coral y las algas que viven en ellos. Como ejemplo vale citar que el 75% de la barrera de coral en Australia ha desaparecido.
Los desechos plásticos representan un gran problema para los océanos y mares. Cada año se arrojan en el mar 8 millones de toneladas de plásticos. Estos residuos se depositan en el fondo marino como micropartículas que en muchas ocasiones, los peces consumen con su alimento. Muchos desechos son arrastrados por las diversas corrientes marinas y terminan en alta mar. Otros, que no se trasladan a mar abierto, ensucian y contaminan las costas de todos los continentes.
El reciclado y la economía circular son algunas posibles soluciones. La educación es primordial. Facilitaría el aumento de sensibilidad y la responsabilidad por parte de las generaciones futuras. Como aconsejan los biólogos marinos, se debe actuar sobre todos estos peligros para recuperar en parte los océanos y mares del mundo.
